Córdoba, Ver. – Leticia López Landero, alcaldesa de Córdoba, se sumó a la larga lista de políticos que agarran de «bandera política» la construcción del paso a desnivel de la calle 39 en La Estación.
Este es un proyecto que lleva décadas y no se ha podido concretar porque sencillamente la obra es compleja, pero se retoma cuando se acercan elecciones, tal como ocurre en esta ocasión, cuyo proceso electoral comenzó oficialmente el pasado 7 de septiembre y las votaciones serán el 6 de junio de 2021, jornada calificada como histórica y compleja en la historia del país.
Priístas y panistas, principalmente, por años han tomado como «bandera política» dos grandes obras, eternas promesas de campaña: el puente a desnivel de La Estación y la reubicación de la caseta de Fortín.Es una lástima que los políticos, como recién lo hizo, Leticia López Landero, anunciara con bombo y platillo el inicio de los trabajos del mencionado puente a partir de la próxima semana, porque ella y su equipo de trabajo saben que no es fácil por todo lo que implica, pero ahora es cuando deben hacer uso de todo recurso rumbo al 2021, aunque engañen a la gente.
Basta con recordar que, siendo alcalde de Córdoba, Tomás Ríos Bernal en 2014-1017, anunció que existía la factibilidad y hasta recursos financieros para el inicio de obra del puente peatonal. Tema que también abordó en su primer período como presidente municipal en 1994-1997.
El 12 de junio de 2018 el candidato a gobernador de la coalición PAN-PRD y MC, Miguel Ángel Yunes Márquez, al visitar Córdoba en campaña también retomó las dos obras: el puente y caseta de Fortín.La lista de candidatos y políticos que han prometido el puente a desnivel es interminable, pero como dice el refrán «prometer no empobrece a nadie».
Hay que esperar la próxima semana el inicio de los mencionados trabajos anunciados por Leticia López Landero a través de los diferentes medios de comunicación «comprados», pero sobre todo que empiecen y se concluyan, de lo contrario, será terrible el caos vial que se generará por meses.Tampoco se vale que termine la administración municipal y la obra quede inconclusa, y dejar la «bolita» al próximo alcalde, porque lo que se promete se cumple al cien por ciento.
