El empresario mexicano plantea semanas laborales de tres días, con jornadas de 11 horas, para abrir más puestos laborales; también plantea elevar a 75 años la edad de jubilación
El magnate mexicano Carlos Slim planteó este miércoles que los empleados trabajen tres días a la semana durante 11 horas para abrir espacio a otras personas, elevar 10 años la edad de jubilación (hasta los 75) para evitar la quiebra de la situación financiera de los países, no vender por debajo del coste, tener estructuras simples o mínimos niveles jerárquicos.
Durante su participación virtual en el XIX Congreso de Directivos CEDE, el empresario señaló que la pandemia por el Covid-19 ha hecho más profunda la crisis que ya se observaba y ha elevado las cifras de desempleo, desplomando el consumo de bienes y servicios no necesarios, así como ha saturado los servicios de salud.
Este «virus invisible», que ha puesto en jaque a todo el mundo, «ha generado una situación económica y social inusual que va a conducir a una nueva normalidad, aunque muchas cosas ya no serán iguales.
«Hay un cambio civilizatorio de la sociedad industrial a una nueva civilización tecnológica que tiene efectos muy positivos», añadió.
En esa nueva normalidad, Slim Helú también consideró necesario incrementar la producción, la competitividad, el control de gastos, minimizar la inversión en activos no estratégicos, reinvertir el dinero o potenciar la creatividad empresarial.
Además, destacó la importancia de la cooperación entre los países para el desarrollo de las vacunas, que cree que estarán listas antes de un año, y la labor ejemplar del personal médico.
«España podría hacer mejor todo para no quedarse atrás»
Carlos Slim reconoció que España podría hacer mejor todo para no quedarse atrás en un contexto como el actual y ha propuesto mejorar la educación y la capacitación tecnológica o incrementar la inversión privada en infraestructuras.
Por otra parte, el dueño de América Móvil, del Grupo Carso o de la española FCC, insistió en que es muy importante que España no se quede atrás y que continúe los cambios a toda velocidad para tener cierta presencia en esta nueva civilización, que se ha acelerado con la pandemia y que tiene sus pilares en el desarrollo tecnológico y la innovación.
En el caso de España, que en su opinión tiene un gran capital humano, sería esencial conducir este cambio civilizatorio como lo está haciendo China, líder mundial a nivel económico, tecnológico e industrial gracias a su alta productividad.
Otro retraso importante en España, desde su perspectiva, es en materia de infraestructura, rubro en el que vio la necesidad de mayor inversión privada para contribuir a la riqueza y a la generación de empleo.
En el caso de Europa, Slim señaló que le cuesta trabajo hacer los cambios. Contrastó que, mientras en Estados Unidos y China se ven empresas como Amazon o Alibaba, en España y Europa no se ven iniciativas a pesar de que hay grandes oportunidades.
