Descubren vestigios olmecas en Ixhuatlán del Sureste
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se presentó en un predio de la colonia Las Águilas, donde se han encontrado varias piezas arqueológicas que pertenecían a entierros olmecas.
Esta semana, durante los trabajos de construcción de una casa en esta colonia del municipio de Ixhuatlán del Sureste, se ubicaron aproximadamente 100 piezas arqueológicas.
Las piezas fueron resguardadas y el municipio notificó al INAH con el fin de que se puedan catalogar y poner en resguardo en el propio lugar para que la población las pueda apreciar.
Se trata en su mayoría de piezas de vasijas y algunas figuras de barro, las cuales solían acompañar los entierros en la época prehispánica.
Este jueves acudió Alfredo Delgado Calderón, profesor investigador del INAH, para revisar las piezas y ver el trabajo de recuperación que han realizado los propios trabajadores de la construcción.
Por el momento, el terreno se encuentra acordonado mientras se hacen los trabajos de investigación, aunque de manera preliminar, señaló el investigador, corresponden a representaciones humanas, las cuales tienen los ojos cerrados, por lo que podrían corresponder a ofrendas mortuorias.
Los trabajos de investigación podrían tardar un mes y todas las piezas serán exhibidas al pie del museo que está construyendo el municipio.
Miguel Cruz Santiago, dueño del predio, señaló que ellos van a esperar que se concluya la obra, ya que considera que esto ayuda a la población de Ixhuatlán a conocer más sobre su historia.
Cabe señalar que esta colonia se encuentra no muy lejos de Barragantitlán, sitio original de asentamiento de Coatzacoalcos. En 2014, en un predio de Nanchital que limita con Ixhuatlán donde ahora se ubica la planta de Braskem Idesa, se encontraron más de 3 mil piezas arqueológicas.
En esta investigación financiada por la empresa petroquímica se lograron obtener varios datos de los asentamientos olmecas en la zona sur, además de una pirámide apisonada.
Se espera que esta nueva colección pueda aportar más datos sobre las culturas prehispánicas del sur de Veracruz.
Cabe señalar que, en 1852 John Gross Barnard, quien dirigió una Comisión Científica que exploró el Istmo de Tehuantepec, investigó el pueblo de San Cristóbal Ixhuatlán, identificando una escultura parecida a un cachorro de jaguar.
En 1925, el arqueólogo de origen danés Frans Blom, junto con el etnólogo estadounidense Oliver La Farge, descubrieron el ídolo de aproximadamente 75 centímetros de altura, tallado en roca ígnea, la cual fue llevada al parque-museo de La Venta, Tabasco, donde se encuentra resguardada, una réplica se entregó al municipio.