Lo que se sabe de la muerte de un joven golpeado y presuntamente violado en una de las ciudades más tranquilas de México
José Eduardo Ravelo, asesinado en Mérida el 21 de julio de 2021 presuntamente por policías municipales. Crédito: Facebook.
«La blanca Mérida» se encuentra entre las ciudades más tranquilas del país. Sin embargo, los golpes y la presunta violación que sufrió José Eduardo Ravelo, de 23 años, presuntamente por parte de policías de la capital de Yucatán, ha puesto en entredicho la seguridad en esa ciudad.
José Eduardo Ravelo dejó su pueblo en Veracruz, en el oriente de México, al estar asediado por el crimen organizado para ir en busca de un lugar seguro para vivir y trabajar. Sin embargo, su madre asegura que fue violado y recibió golpes que le causaron la muerte en una de las ciudades más seguras del país, presuntamente, por policías municipales.
Ravelo, de 23 años, llegó proveniente de Isla, Veracruz, hace cuatro meses a Mérida, capital del estado de Yucatán, considerada como una de las más seguras de México en la última Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), porque unos amigos le dijeron que era un lugar mucho más tranquilo y seguro.
No obstante, el pasado 21 de julio, cuando ‘El Güero’ —como era conocido entre sus amigos y familia— se dirigía a dejar algunas solicitudes de empleo, fue detenido por agentes de la policía de Mérida en un parque del barrio de San Juan, en el centro de la ciudad, al considerarlo supuestamente sospechoso.
Según él mismo declaró después, fue subido a una patrulla, golpeado, torturado y violado para, después, ser puesto en libertad. Tras su liberación, el muchacho se comunicó con su madre, María Ravelo Echevarría, quien aún vive en Veracruz, para contarle lo que había ocurrido y para solicitarle su ayuda.
Estado grave
La señora Ravelo llegó a Mérida el 24 de julio. En el cuarto que su hijo rentaba, lo encontró en estado grave. “Escupía sangre, y no podía moverse ni levantarse de la cama”, narró al sitio mexicano Pie de Página.
La señora aseguró que ese mismo día llevó a José Eduardo al hospital O’Horan, administrado por la Secretaría de Salud estatal, y ubicado en la misma ciudad de Mérida. Con dificultad, el muchacho explicó al médico que lo atendió que unos policías lo habían presuntamente violado, afirmación que el doctor no creyó, relató su madre.
“¿Cómo que te violaron policías? ¿No será que eres gay?”, recordó su madre que preguntó el doctor. Su hijo aseguró que no lo era.
“Yo le respondí que, aunque lo fuera nadie tiene derecho a golpearlo y violarlo”, sostuvo la mujer.
El médico explicó a la señora que tenían que tomarle unas radiografías del tórax para atenderlo. Al no contar con dinero para pagarlas, tuvieron que asistir a la Fiscalía del Estado de Yucatán para interponer una denuncia y llevar a cabo el proceso con los médicos de la institución. El muchacho logró declarar, a pesar del dolor, y se le abrió un expediente.
El médico legista, dice el sitio Pie de Página con base en declaraciones de su madre, confirmó que el muchacho había sido víctima de violación.
Con la denuncia interpuesta, la Fiscalía ordenó al mismo hospital que lo atendiera. Días más tarde de haber estado en el mismo lugar, fue recibido e ingresado; no obstante, el joven murió el 3 de agosto.
Tras su muerte, la necropsia realizada por el forense reveló que la causa de muerte de Ravelo fue “síndrome de destrucción orgánica múltiple y politraumatismo”, es decir, a consecuencia de golpes recibidos.
Exige justicia
Ravelo Echevarría veló a su hijo durante unas horas en una modesta funeraria del municipio de Kanasín, cerca de Mérida, para, al siguiente día, presentarse en el Palacio de Gobierno de Yucatán. Ante la mirada de habitantes y turistas, colocó el féretro de su hijo frente a la puerta de la oficina del gobernador y exigió que los policías que presuntamente ocasionaron la muerte a José Eduardo fueran detenidos y castigados.
La madre fue recibida por Gabriel Puc Maldonado, director Jurídico de la Secretaría de Gobierno del Estado, quien aseguró que se haría justicia por la muerte del joven. Además, le aseguró que ya se habían iniciado las investigaciones y que había personas detenidas.
Ravelo Echevarría declaró al sitio mexicano La Silla Rota que su » hijo fue violado dentro de la misma cárcel. En el video (del centro de detención) se ve, según me dijo el abogado de la Fiscalía que cuando estaba adentro se escuchaban gritos y nadie lo ayudó, pero por teléfono me dijo que en la patrulla, ya con los hechos presentados comprendí que lo violaron varias veces en la patrulla y cárcel, sólo que él no me supo explicar todo».
Detienen a cuatro policías
El 7 de agosto pasado, Gobierno de Yucatán dio a conocer a través de un comunicado de prensa que cuatro agentes de la Policía de Mérida habían sido detenidos por su probable participación en delitos que resultaron en el fallecimiento de un joven.
Los detenidos fueron identificados por las iniciales J.E.H.H, E.M.R.L., A.G.G.M. y R.G.B.R., todos, dijo el gobierno estatal, “eran agentes de la Policía Municipal de Mérida, cuando se cometieron los presuntos hechos”.
Este lunes, el Diario de Yucatán aseguró que dos de los cuatro policías detenidos como probables responsables de la agresión, tortura y abuso sexual del joven veracruzano «son fundadores en la nueva era de la corporación policiaca y lograron ascensos por su buen desempeño».
«Los dos agentes tienen 18 años de antigüedad en la Policía de Mérida, son considerados comandantes porque también alcanzaron el grado de policía segundo», publicó el periódico. «Asimismo, uno de los detenidos habría recibido un reconocimiento por el caso del policía asesinado en la capital yucateca el mes pasado».
El fin de semana, decenas de personas se reunieron vestidas de negro frente al Palacio de Gobierno de Yucatán para exigir que se haga justicia por la muerte de Ravelo.
Por su parte, María Ravelo Echevarría viajó este mismo fin de semana a Isla, Veracruz, con el cuerpo de José Eduardo, lugar donde fue velado nuevamente por familiares y amigos para ser sepultado en el panteón municipal.
Su caso se suma a otros de abuso policial en México como el de Ayotzinapa, Guerrero (septiembre de 2014), Tanhuato, Michoacán (mayo de 2015); Nochixtlán, Oaxaca (junio del 2016); y entre los más recientes la muerte de Giovanni López en Jalisco en 2020 y de Victoria Salazar, en Quintana Roo en marzo 2021.
Fuente: Univisión