PUNTO Y COMA
Por Yair Ademar Domínguez
Los políticos veracruzanos de siempre, los que han medrado con el poder para sí mismos y sus familias pretenden ahora crear un mal llamado movimiento opositor al gobierno de Veracruz. Son dueños de una cola muy larga y un historial muy turbio, piensan que los veracruzanos tenemos una memoria flaca, que hemos olvidado sus tropelías en el pasado reciente.
Para muestra basta un botón, de quién intenta revivir en la vida pública, Dante Delgado, quien estuvo preso en el Penal de Pacho Viejo en 1994, acusado de robarse el dinero de los veracruzanos cuando fue gobernador y que salió libre, no por inocente sino porque el delito prescribió. Si creen que los veracruzanos ya olvidamos eso, ¡se equivocan!
¿Y Héctor Yunes Landa? A los veracruzanos no se les olvida cómo, al lado de Fidel Herrera Beltrán, con una gran red de complicidades, les quitaron 500 millones de pesos a más de mil personas que con gran esfuerzo habían invertido el patrimonio de toda una vida de trabajo en la Caja de Ahorro del Ingenio El Modelo. Aunque algunos llegaron a la cárcel, la mayoría de los implicados directamente fallecieron en circunstancias muy misteriosas.
¿Y los senadores del PAN? Por una parte Indira San Román a quien los veracruzanos no la conocen y sólo tuvo un fugaz momento mediático por ser fiel servidora de Miguel Ángel Yunes y de Julen Rementería del Puerto a quién los habitantes que viven en la región de Xalapa y Coatepec se acuerden de él cada vez que llueve, por las malísimas condiciones en que dejó esa carretera que construyó durante el bienio Yunista, en donde los accidentes vehiculares son pan de cada día. Y esto, sólo como un pequeño botón de muestra.
Estos políticos tradicionales, del PAN, PRI, PRD y MC, lucraron siempre con el poder, se enriquecieron a manos llenas y ahora pretenden crear un “Movimiento por la justicia” en Veracruz. Se les olvida que ellos endeudaron al estado, que ellos fueron cómplices de que se asentara la delincuencia, que ellos, con los saqueos de sus gobernantes, fueron cómplices. Y ahora, que se está enderezando el barco y solucionando los males que ellos causaron, se agrupan, se alinean, crean un frente, para continuar con la corrupción que siempre han promovido.
Creen que los veracruzanos están ciegos, que los veracruzanos no tienen memoria, que son faltos de inteligencia, pero se equivocan. Por sus manos pasaron oportunidades maravillosas de desarrollo para este gran estado ¿y qué hicieron? Se sumaron al saqueo algunas veces y otras callaron, se quedaron como estatuas, inmóviles, sin mover un dedo, para dejar, por ejemplo, que Javier Duarte de Ochoa saqueara las arcas del estado de Veracruz e inyectara agua destilada a niños enfermos de cáncer.
No se puede ser voz crítica desde la deshonestidad, con la cola larga. Por eso los veracruzanos decidimos sacarlos del Gobierno para que nunca regresen y le hagan daño a Veracruz de nueva cuenta.
Se equivocan, el Veracruz de hoy ya no es el Veracruz de la impunidad en el que vivieron durante muchos años; en Veracruz se aplica la ley y se procura justicia sin distingo, porque su época de impunidad ya no regresa a territorio veracruzano.
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