Rosalía conquista al Auditorio Nacional: “Tienen mi corazón robado”
Para Rosalía, la “M” es de México y de “Motomami”. La artista urbana española ofreció el primero de dos conciertos con entradas agotadas en el Auditorio Nacional en su debut en la capital mexicana y en el arranque de la sección latinoamericana de su gira mundial.
“Es muy fuerte para mí llegar y tocar aquí por primera vez”, dijo Rosalía el domingo por la noche sosteniendo una guitarra eléctrica. “Me tenéis el corazón robado porque me habéis recibido de esta manera, estamos todos muy felices de tocar para vosotros”.
Además de la guitarra, Rosalía tocó el piano y realizó múltiples coreografías acompañada de un cuerpo de ocho bailarines. Durante el concierto, los videos proyectados en pantallas gigantes en el auditorio fueron trasmitidos en vivo con diversas cámaras, incluyendo una manejada por un operador desde el escenario, lo que le daba un aspecto de sofisticado video musical a la proyección, aunque al ver directo a la tarima también se sentía como si se tratara de un rodaje.
La intérprete de “Chicken Teriyaki”, “Con altura”, “Bizcochito” y “Malamente”, galardonada con el Grammy y el Latin Grammy, se había presentado previamente en el Festival Ceremonia de 2019 a las afueras de Toluca, en el central Estado de México.
Rosalía se expresó emocionada por llegar a la capital y recibió regalos del público, incluyendo tres muñecos de peluche del Doctor Simi, una cadena de farmacias de bajo coste muy socorrida entre los mexicanos, cuyos peluches se han convertido en una especie de trofeo para los artistas extranjeros apreciados por el público.
El cariño fue recíproco, al igual que en su más reciente álbum “Motomami”, Rosalía dijo su “Abcdefg” y al llegar a la M dijo: “M de…”, el público respondió “Motomami” pero Rosalía los corrigió: “¡M de México! y de Motomami”.
Rosalía continuará su gira por las ciudades de Guadalajara y Monterrey para viajar después a Sao Paulo, Buenos Aires, Santiago de Chile, Bogotá, República Dominicana, Puerto Rico y Estados Unidos.
Fuente: Sin Embargo