El Presidente llena el Zócalo y manda mensaje: nada de zigzaguear o de medias tintas
Como venas hacia el corazón de México, el Zócalo de la Ciudad de México, miles y miles de personas provenientes del norte a sur del país caminaron en las calles aledañas con banderas, cohetes y alegría para acudir al llamado del Presidente Andrés Manuel López Obrador, quien en su mensaje de este sábado prometió a sus seguidores que independientemente de quién sea el candidato de su movimiento “habrá continuidad con cambio”.
Más de media hora después de que comenzara el mensaje del gabinete energético y del Mandatario federal frente a Palacio Nacional, el pueblo seguía intentando ingresar a la plancha donde hace 85 años el Presidente Lázaro Cárdenas emitió un mensaje por la Expropiación Petrolera, un acto en el que López Obrador aprovechó para insistir en la soberanía del país y aclarar, ante las voces que surgen de EU con inmiscuirse en la política de seguridad: “México no es protectorado de Estados Unidos”.
En su discurso, en el que hizo un amplio reconocimiento histórico a lo hecho por el General Cárdenas en 1938, López Obrador también trazó la ruta dentro de la Cuarta Transformación con miras al proceso electoral del 2024 —con los tres aspirantes presidenciales de Morena a sus espaldas, Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard y Adán Augusto López— y advirtió que no puede haber retroceso ni para tomar vuelo.
López Obrador dijo que en la historia de la nacionalización de la industria petrolera “hay enseñanzas mayores” y apuntó que “la principal es que sólo con el pueblo, sólo con el apoyo de las mayorías, se puede llevar a cabo una transformación popular para hacer valer la justicia y enfrentar a los reaccionarios que se oponen a perder privilegios”.
Y enfatizó: “Hoy de nuevo manifestamos, exclamamos a los cuatro vientos: nada de zigzaguear, sigamos anclados en nuestros principios, reafirmemos la decisión y el rumbo que hemos tomado desde que inició el gobierno. No a las medias tintas, no aceptaremos nunca que en México se imponga una minoría a costa de la humillación y el empobrecimiento de las mayorías”.
El Presidente López Obrador salió de Palacio Nacional de la mano de su esposa, la doctora Beatriz Gutiérrez Müller, apenas unos minutos después de las 17:00 horas, mientras recibía regalos de ciudadanos pegados a las vallas pidiendo su atención y regalaba autógrafos. En su camino al templete, saludó a gobernadores morenistas que se trasladaron a la capital del país para la conmemoración.
Vistas panorámicas que eran transmitidas por las pantallas al frente del escenario mostraban no sólo una plancha de Zócalo cubierta, sino incluso calles como Madero y 16 de Septiembre repletas de simpatizantes buscando llegar a la celebración.
El acto de este sábado se dio además en medio de un roce en la relación binacional con Estados Unidos por su intervencionismo en la política interna en torno al combate al narcotráfico, exacerbado por el secuestro de cuatro estadounidenses en Tamaulipas atribuido al Cártel del Golfo.
En su discurso el Presidente aclaró: “lo más importante es que desde aquí, desde este Zócalo, corazón político y cultural de México, les recordamos a esos políticos hipócritas e irresponsables que México es un país independiente y libre, no una colonia ni un protectorado de Estados Unidos, y que podrán amenazarnos con cometer cualquier atropello, pero jamás, jamás, permitiremos que violen nuestra soberanía y pisoteen la dignidad de nuestra patria”.
Fuente: Sin Embargo