Chivas remonta para eliminar al América y avanzar la final de la Liga MX
Guadalajara logró la épica, y eliminó al América en su casa 1-3 para volver a una final, que al igual que en 2017, los enfrentará ante Tigres en suelo tapatíos.
Todos los caminos llevaban al Azteca, y es que nadie se quería perder este duelo lleno de historia, pasión y tradición, con el aliciente de estar en disputa el último boleto a la gran final.
Desde los primeros minutos Guadalajara mostró que no saldría a especular, y tomó las riendas del encuentro pero con poca claridad, intentando penetrar por las bandas con Alvarado, Vega y Cisneros.
18 minutos bastaron para que por fin esa ligera superioridad rojiblanca se reflejara en el marcador, tras una jugada individual de Roberto Alvarado que comenzó recuperando en su área, recortó a tres futbolistas azulcremas para quedar de frente al arco todavía con mucho por recorrer, pero con un pase preciso habilitó a Ronaldo Cisneros que por velocidad le ganó a Cáceres y ante la salida de Malagón, alejó la pelota del arquero y tras un rebote en el central charrúa que no dejó de correr hasta que perdió el equilibrio, el del chiverío ganó la posesión de la pelots y a merced solo empujó la pelota al fondo del arco Guadalajara se acercaba al objetivo.
Y aunque ya envalentonados el grito de Chivas aparecía en el Azteca, de inmediato el abucheo secundado por el “Águilas” lo acallaba.
No se registraba media hora en el cronómetro y Chivas ya tenía a sus dos centrales Sepúlveda y Briseño amonestados, además de su contención el Oso González, ahora América comenzaba a tomar la batuta del juego.
Disparos sin rumbo al arco, centros imprecisos y poca claridad de frente al arco tenían los azulcremas, sin embargo, ya dominaban la tenencia de la pelota, aunque finalizarían el primer tiempo sin un solo disparo a portería.
El segundo tiempo empezó con las águilas echadas al frente, de a poco trabajaron el juego a pico y piedra, hasta que al minuto 57, Diego Valdés de cabeza, hizo explotar el Azteca, tras un centro frontal de Álvaro Fidalgo, el chileno solamente peinó la pelota anticipando la marca del Pocho Guzmán, haciendo posible el recorrido de Miguel Jiménez.
Guadalajara remaría contra corriente de nuevo, pero no por mucho mucho tiempo, porque al minuto 63 los dirigidos por Fernando Ortíz se quedarían con uno menos, tras la expulsión de Álvaro Fidalgo por una fuerte entrada sobre Fernando Beltrán.
La expulsión obligó al Tano a modificar, con una doble contención con Jonathan Dos Santos y Pedro Aquino, el rebaño, empoderado por la superioridad numérica, se volcó al ataque, y le resultaría, por las bandas concentraron la ofensiva, y en un centro de Mozo, que atravesó toda el área, cayó en los pies de Alexis Vega que controló y remató ante la salida de Malagón que logró atajar pero en el rebote Ronaldo Cisneros remataría de cabeza con el arco abierto, Chivas estaba de nuevo a un gol.
La fiesta se apagó pronto luego de que el árbitro Víctor Cáceres tuviera que revisar el VAR, tras la consulta determinó falta de Guzmán sobre Layún, por lo que invalidó la acción.
Guadalajara no se quedaría de brazos cruzados, al 74 en un tiro libre, los de Pauno, sorprenderían a todos con una jugada de pizarrón, Alvarado tocaría para Alan Mozo y el canterano de Pumas, encontraría puerta con un potente remate de derecha que entraría pegado al poste derecho de Malagón, Chivas ya ganaba y estaba otra vez en la pelea.
El Azteca se convirtió en una sucursal del Pandemonium, la locura en las gradas y la intensidad en la cancha, América incorporó a Emilio Lara como tercer central jugando a cerrar el partido con una línea de cinco, Guadalajara, echado al frente mantenía la esperanza de marcar el gol que le diera el pase a la final.
El cronómetro corría y el vendaval rojiblanco hacía parecer que América no resisitiría, y así fue, al minuto 89, Jesús Orozco Chiquite marcaría de cabeza el tercer gol que enmudeció a la fanaticada azulcrema, el “Chivas, Chivas” retumbaba en el Azteca, nunca la capital fue más rojiblanca como en ese momento, al Guadalajara lo separaban 9 minutos de la gran final.
Con más ímpetu que futbol, América intentó al ataque, pero poco podía hacer, la línea de 5 de Paunovic estaba resultando efectiva, y ya desesperadas las águilas, el rebaño aprovecharía los espacios.
Víctor Cáceres pitaría el final, y Guadalajara volvería a una final tras 6 años sin hacerlo, y vaya manera de lograrlo, ante el odiado rival, en su casa y volviendo de las cenizas, las Chivas de Paunovic, están más vivas que nunca.
Fuente: Telediario